WE'RE NOT IN WONDERLAND ANYMORE, ALICE.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Hoy fue un día raro (y todavía no termina).
Aveces pienso que un halo de energía pasa por la atmósfera de una zona determinada y de repente afecta a todos. Algunas veces es energía positiva, otras.. no tanto. Y todo sale mal, estás desganada, no encontrás las cosas, te bajoneás sin razón, ninguna canción te gusta, ninguna comida te seduce pero terminás comiendo por montones igual, por ansiedad, o quizás terminás no comiendo nada. Y hablando con los demás te das cuenta que a ellos tampoco les está yendo bien, que está siendo un mal día para todos. O un día raro. Si. Odio los malos días, pero los días raros me desconciertan. Porque al ser así, raros, no tienen adjudicada ninguna palabra en el diccionario que los describa o explique por qué son así, o si dentro de lo raro es normal que, por ejemplo, no te salga nada de lo que te propongas hacer.
Y que se puede hacer, entonces? Tal vez tratar de evitar (por ese día) esas pequeñas cosas que desestabilizan la rutina, por las dudas...